A veces es muy fácil desanimarse, mirando las adversidades que se presentan. La persona pierde el ánimo, pues no puede percibir si el futuro será mejor. El sentimiento de cansancio y el deseo de renunciar parecen crecer. Es exactamente en este momento que Dios, a través de su palabra, muestra que él está siempre listo para impulsar hacia adelante y hacia arriba, renovando las fuerzas del siervo! Es por eso que escribió en Isaías 40:31 que "los que esperan en él renuevan sus fuerzas". Esta frase significa que en un momento de desaliento, uno debe tener esperanza y confianza en Dios, creyendo que las luchas del día a día serán vencidas y Él dará el sustento para no desfallecer.
Animarse en Dios! cuando el Señor opera la renovación, la fe vuelve a su lugar de mando, trayendo un nuevo ánimo, nueva alegría y paz. En realidad, se le dio la condición y el camino fue abierto para que el Señor Jesús trabaje a nuestro favor. ¡Hay que tener esperanza de victoria! Dejar que el ánimo que viene del Señor una vez más se haga cargo del corazón. ¡No hay que rendirse! Caminar y enfrentar este momento con la fuerza del Señor para sostenerlo. Él ama a los suyos y tiene la respuesta preparada para cada situación.
El plan de Dios para la iglesia e Israel
El texto de Lucas 8:41-56 habla acerca de la restauración de la vida de la hija de un hombre llamado Jairo. Sin embargo, después de que se encuentran y comienzan a caminar hacia la casa del judío, una mujer no identificada toca el borde del vestido de Jesús y es curada. Jesús para su camino, da la espalda a Jairo y mantiene un diálogo con la mujer, solo con ella. No habla con nadie más cerca de allí, hasta que la despide en paz. después de despedirla, vuelve a caminar con Jairo y cuida, entonces, de su hija. Este evento es profético, porque Jairo tipifica a Israel y la mujer tipifica a la iglesia gentiles, que no tiene una identificación humana, una placa, pues es la iglesia fiel. Jesús vino por Israel, pero Él abre un período de tiempo para cuidar del pueblo gentil y interrumpe su proyecto relativo a su amado pueblo.
El período en que Jesús está tratando con la mujer (iglesia) se llama período de gracia. Desde hace aproximadamente dos mil años que el Señor no habla directamente con Israel, y está volviendo a tratar con la iglesia. Toda su atención está en la iglesia y permanecerá así hasta que la despida en paz por la eternidad en el arrebatamiento. Entonces, Él volverá su atención hacia Jairo, solo hacia Israel. Se ve que en el texto la puerta de gracia está cerrada y nadie más puede entrar y la Trinidad solo cuidará de la casa de Israel (Lc 8:51). El texto de Isaías 49:13-26 se refiere proféticamente a ese momento, cuando el Señor volverá a cuidar de Israel. Como en el texto de Lucas, muchos dirán que la niña ya murió, es decir, la alianza del Señor con Israel terminó. Dios abandonó a su pueblo. Israel está solo. Pero eso no es cierto. Veamos algunos detalles de este texto:
Versiculo 13: El Señor dice que ha llegado el momento de cuidar a Israel, que es hora de que este pueblo se regocije.
Versiculo 14: Israel cree que su Dios lo ha abandonado, se ha olvidado de él.
Versiculo 15: El Señor responde diciendo que aunque una mujer se olvidara de su hijo, lo cual parece imposible (aunque María se olvidó de él), Dios nunca se olvidará y nunca se olvidará de Israel, a quien tomó por hijo.
Versiculo 16: En las palmas de mis manos te grabé. El Señor probó su amor por Israel cuando sus manos fueron clavadas en la cruz.
Versiculo 17: El pueblo de Israel será acogido por el Señor, pero sus enemigos serán eliminados de su medio.
Versiculo 18: Levanta tus ojos y mira, todos estos que se juntan vienen a ti. El Señor traerá a la iglesia que fue arrebatada, vestida de gloria, para estar entre el pueblo de Israel y dice que como la iglesia, también estará siempre con el Señor (como novia).
Versiculo 21: Israel pregunta, ¿quiénes son estos? Israel se sorprenderá del número de los salvos que estarán en medio de ellos como un solo pueblo. Israel estará saliendo de la gran tribulación y piensa que está solo, que restauran pocos siervos del Señor. He aquí que me han dejado sola. La iglesia fue arrebatada. El Espíritu Santo subió con la iglesia. Israel quedó solo en medio del mundo y pasó por la gran tribulación. La pregunta de Israel. Y estos, ¿dónde estaban? La iglesia estaba en gloria, en las bodas del Cordero.
Versículo 22-26: Israel reinará junto al Señor Jesús, junto con la iglesia. Los poderosos del mundo se convertirán en siervos y el Señor traerá juicio sobre todos los enemigos de Israel.
El consejo del Señor para el perdón y la salvación
En el texto de Jeremías 5:1 hay un consejo dado por el Señor a Jerusalén. Allí pensamos: ¿Por qué Dios se preocupa tanto del ser humano? ¿Por qué Dios insiste en que el ser humano lo conozca y confíe en él? ¿Sabes por qué? porque el ser humano necesita perdón y no hay nadie en el mundo que pueda dárselo. No hay otra manera de alcanzar la remisión de los pecados sino dentro del proyecto de salvación que el Señor ha preparado para el ser humano. En Cantar de los Cantares 3:1-2 la Palabra dice que la iglesia hizo esa búsqueda y no lo encontró.
La iglesia está formada por gentiles (todos los que no son de Israel) y nadie sabía qué hacer para encontrar al Señor. En el texto de Jeremías 5:1, el Señor dijo que no se encontraría en las calles ni en las plazas a quien practique la justicia, porque hasta entonces Jesús no se había encarnado para cumplir su ministerio, enseñando la verdad y trayendo el perdón de Dios a los hombres. No había ningún justo, por eso vino Jesús (Rom 3:10). Cuando la iglesia gentil quiso encontrar al Señor hizo este camino descrito por Jeremías, pero no lo encontró. Al alejarse de estos lugares, pronto lo encuentra (Can. 3:4). El Señor está diciendo a Israel que necesitan la salvación, pero que no sería concedida por hombres comunes. La salvación sería enviada desde lo alto, por el Dios de la Salvación.
La salvación no se encuentra en las calles. Jesús es el camino, el único camino. El que cree que todos los caminos conducen a Dios, es uno de los errores de la religión que no ha encontrado al Señor y no sabe dónde está. Jesús no está en las plazas, lugar de reunión de curiosos, desocupados, comerciantes, mendigos, lugar que se compara a los movimientos, donde tiene de todo, sucede de todo, pero el Señor no está allí. La iglesia lo encontró porque se alejó de esos lugares. y porque ella lo encontró, obtuvo el perdón del Señor.