Comentarios Bíblicos: del 14 al 20 de octubre de 2024

El derramamiento del Espíritu Santo sobre los seres humanos

• En el texto de Oseas 3:1 vemos algo profético que es una orden dirigida al profeta (Espíritu Santo). Vaya de nuevo, porque la primera vez que el Espíritu Santo fue enviado al hombre en el antiguo testamento, el Señor eligió a Israel y amó a Israel. En ese momento, el Espíritu Santo descendió sobre siervos separados para ser utilizados para anunciar la obra de Dios a los seres humanos. Esta segunda vez, la bendición es para el pueblo gentil, es decir, para la iglesia. En nuestro tiempo, el Espíritu Santo ha sido derramado sobre todos para alcanzar el sacerdocio universal del creyente. La condición pecaminosa del pueblo era la idolatría, era el amor a un Dios distinto al Señor, el verdadero esposo (Dios). Por eso a esta mujer se la llama adúltera. Una iglesia que no tiene ningún compromiso con el Señor y no se ha entregado al amor verdadero, tiene ese título ante el Señor. Pero “con amor eterno”. Él ama a los gentiles, a la iglesia, y quiere rescatar a todos.

V. 2 – “Me lo compré por quince piezas de plata, y un homer de cebada, y medio homer de cebada”. El Señor fue traicionado por treinta piezas de plata (Zac 11:12): quince piezas de plata por el pueblo judío y quince piezas de plata por los gentiles. El Señor nos compró (Is 43:1). “...y con tu sangre compraste para Dios hombres de toda tribu, lengua, pueblo y nación”. (Apocalipsis 5:9).

V. 3 – “Y le dije: Te quedarás conmigo muchos días; No te prostituirás, ni serás de otro hombre; Así también yo te esperaré”. La iglesia está bajo el cuidado del Espíritu Santo. Ella está con Él. La iglesia fiel no entrega su corazón a otros dioses. Ella sólo tiene un salvador. Ella sólo espera a un ser querido. Muchos días, es decir, desde Pentecostés hasta el arrebatamiento. Y el Señor también la espera.

V. 4 – “Porque los hijos de Israel estarán por muchos días sin rey, y sin príncipe, y sin sacrificio, y sin imagen, y sin efod ni terafines”. Ésta es la situación actual en Israel. Mientras la iglesia ha estado bajo el cuidado del Espíritu Santo durante muchos días, Israel al mismo tiempo está sin comunión con Dios. Desde antes de la diáspora, se ha detenido el sacrificio.

V. 5 – “Entonces los hijos de Israel volverán y buscarán a Jehová su Dios, y a David su rey; y temerán al Señor y a su bondad al final de los días”. Profecía sobre la conversión de Israel y su reconciliación con Dios.

Los mensajes de Dios para Israel y la Iglesia

• En la Biblia hay dos mensajes: i) Uno para Israel, y este se encuentra literalmente en el texto de las Escrituras, ii) el otro está dirigido a la iglesia, y su aplicación es profética y espiritual y sólo es posible entender a la luz de la revelación dada por el Espíritu Santo. Así, este texto de Zacarías 13:8-9 es una profecía sobre Israel respecto al tiempo en que el Señor vendrá a restaurar su fortuna. En cuanto a la iglesia, deducimos lo siguiente: Dos partes de la tierra serán cortadas. El mundo se puede dividir en tres partes, y esta es la división que hizo Noé, y de ella ya hablamos durante la lectura de la palabra:

1ª parte: Israel, el dueño de la tierra, el que tiene derecho a la herencia, simbolizado por Sem (quien dio origen al pueblo semítico - hebreo);

2ª parte: Iglesia, que no tiene nada, pero vive en la herencia de Sem, simbolizada por Jafet (su herencia es espiritual);

3ª parte: El resto del mundo, que no tiene herencia física ni espiritual, simbolizado por Can, que generó a Canaán, a quien el Señor destruyó.

• El mismo simbolismo se encuentra en el pasaje sobre la resurrección de Lázaro. A pesar de ser una familia que Jesús amó y tener su experiencia de salvación, no podemos negar el paralelo profético:

a) Lázaro estaba muerto. Tipificando el mundo sin Dios. Las hermanas dijeron: si Jesús hubiera estado con él, no habría muerto.

b) Marta tipifica a Israel. Ella fue la primera en conocer a Jesús. Entró a su casa. Pero ella se distrajo con otras actividades. Se cansó y ya no podía oír la voz de Dios.

c) María tipifica a la iglesia. Jesús entró en su casa por causa de Marta, pero ella lo amaba. Tomó la decisión de dejarlo todo para escuchar su voz. Jesús dijo que ella escogió la parte buena y que nunca le sería quitada (ese es mi pueblo).

• Este texto de Zacarías está dirigido proféticamente a la iglesia, ya que Israel aún no ha entendido el proyecto de Dios y el mundo no quiere saber del Señor, ni de su proyecto. Lo que quedó fue sólo la iglesia. A pesar de esto, ha sido duramente probada desde el principio (“Mi amado es para mí una bolsa de mirra”, que representa su sufrimiento: Cantares 1:13a). Pero ella nunca negará al Señor y el Señor la confirmará como su pueblo en su Eternidad.

Información sobre el profeta de Amós.

• El nombre Amós significa: Conductor de carga. Es autor del libro que lleva su nombre en la colección de los 'Doce Profetas' o 'Profetas Menores'. Su profecía es probablemente el más antiguo de los escritos proféticos. En cuanto a la época en que Amós escribió, como parece que ejerció su ministerio durante los reinados de Uzías y Jeroboam II (Amós 1:1), debió ser contemporáneo de Oseas. La misión de Amós se llevó a cabo pensando en las diez tribus (Amós 7:10-13). Sin embargo, no pertenecía al reino de Israel, sino que vivía en Tecoa, quizás su tierra natal, una ciudad al sur de Belén, al borde de los grandes pastos de la región montañosa de Judá.

• En cuanto a su vida personal, fue pastor y agricultor (Am. 7:14), y no 'profeta, ni discípulo de profeta', esto quiere decir que no había sido educado para esta misión, sino que fue llamado a profetizar al pueblo de Israel por la fuerza irresistible de Dios (Amós 3:8 – 7:15). El profeta alude a este hecho cuando Amasías, el sacerdote idólatra de Betel, lo acusó de conspirar contra Jeroboam. Su temprana ocupación debe eliminar cualquier sospecha de conexión política con la casa de David, y resalta la soberanía y sabiduría de quienes buscan a sus ministros tanto en la tienda de los pastores como en el palacio de los reyes, dando a cada uno la aptitud necesaria para cumplimiento de sus deberes.

Información sobre el libro del profeta de Amós

• El texto de Amós es sencillo, pero de ninguna manera carece de belleza. Su forma de vida se puede descubrir a través de las ilustraciones que elige, en su mayoría extraídas de servicios rurales. Muchos son originales y admirables, y todos revelan la vida de la Naturaleza. El conocimiento que revela de acontecimientos de remota antigüedad (Am 9:7), y de otros menos antiguos, aún no descritos en ninguna parte (Am 6:2). El encadenamiento regular de sus pensamientos y la corrección de su lenguaje tienden a mostrar que la ocupación responsable, y a menudo peligrosa (Amós 3:12), de un pastor todavía era tan favorable a la cultura intelectual como lo había sido en la época de Moisés. y David. El libro se puede dividir en cinco partes, en cuanto a los temas que allí se tratan:

1. Capítulos 1 y 2: Una serie de acusaciones contra las naciones paganas, y contra Judá, y finalmente contra Israel, por sus pecados, con declaraciones de que el castigo vendría sobre ellos.

2. Capítulos 3 al 5:17: Samaria (sinónimo del reino de Israel). Sus pecados se exponen en detalle y se anuncia un castigo venidero.

3. Capítulos 5:18 al 6:14: Razones de la falsa confianza de los israelitas y las advertencias de repetidos castigos.

4. Capítulos 7:1 a 9:10: Una serie de cinco visiones, que muestran de diversas formas la paciencia y los juicios justos de Dios. Entre la tercera y la cuarta visión se presenta una narrativa personal de profundo interés (Amós 7:10-17).

5. Capítulos 9:11-15: Conclusión, que muestra que la nación será restaurada y nuevas bendiciones la harán próspera. Estos últimos indicios de bendiciones futuras son citados por el apóstol Santiago (Hechos 15:16-17), para mostrar que todas las naciones de la tierra compartirían los beneficios que recibirían los judíos.

• El lenguaje y las alusiones hechas en el libro de Amós sugieren conocimiento de cuán familiares eran los libros de Moisés para el profeta, ver: Amós 2:10 y Deuteronomio 29:5; Amós 4:6-10 y Deuteronomio 4:30 y 30:3; Amós 4:11 y Deuteronomio 29:23; Amós 5:11 y Deuteronomio 28:30-39. En el N.T., Esteban cita el libro en su discurso ante el Sanedrín y por Tiago en el Concilio de Jerusalén (Hechos 7:42-43; 15:16-18). En la primera cita, vale la pena señalar la extensión de la frase “más allá de Damasco” a “más allá de Babilonia”. Y en el último está ‘el resto de los hombres’, según la versión LXX, por ‘el resto de Edom’, porque las palabras “hombre” y “Edom” en hebreo son similares en términos de consonantes. Cualquiera que sea la traducción preferida, el testimonio del profeta sobre la universalidad del Evangelio es admirable. También hay una similitud notable entre Amós 3:7 y Apocalipsis 10:7, ya que en ambos pasajes se declara la revelación del misterio de Dios a los profetas.